¿Nunca te has preguntado qué estás haciendo con tu vida? ¿Si estás dejando huella positiva en los demás? ¿Cómo te recordarán?
Juan Bosco murió un 31 de enero de 1888, ya muy anciano y desgastado. Con una vida consumida por trabajar sin descanso por el bien de los jóvenes pobres y abandonados. Así fue su manera de vivir el evangelio de Jesús de Nazaret como sacerdote.
Por eso el 31 de enero de 2021 en la Parroquia San Francisco Javier de Vitoria-Gasteiz lo recordaremos celebrando las eucaristías a las 11:00 y a las 12:30.
Quienes lo conocieron y vivieron con él, sobre todo los jóvenes que habían sido acogidos por él, lo recordaban como un padre, un maestro y un amigo.
El recuerdo más marcado que dejó fue su sonrisa. Siempre, incluso en los momentos más duros y difíciles de su vida, lo veían sonreír.
Hoy esa sonrisa sigue viva en los miles de salesianos y salesianas y el resto de miembros de la Familia Salesiana, a los que hay que añadir educadores, animadores de tiempo libre y millones de jóvenes que llenan los patios, las casas, las escuelas y las iglesias salesianas.
Todas estas personas nos hacen recordar que en la casa de Don Bosco se sigue sonriendo. Y que la alegría es una cosa muy seria como para dejar que se pierda.
¡Ojalá seamos personas recordadas, al menos, por nuestras sonrisas!
¡Feliz fiesta de Don Bosco!
Pincha en la imagen para celebrar y bailar en este día:
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